Las hermanas
Pintor: Diego Fortunato
Técnica: Acrílico sobre tela (puntillismo).
Medidas: 90 x 60 cm.
Año. 1982
Colección privada del pintor.
VER EL MUNDO CON TUS OJOS
Quisiera ser como eres tú Legolas mio,
que amas sin límites ni confines,
que desconoces las diferencias que nosotros,
los humanos, nos empecinamos en remarcar.
Para ti no existen blancos ni negros,
no sabes que significa ser
"extracomunitario" o meridional,
válido o inválido, rico o pobre,
limpio o sucio...
Tu sólo miras nuestros corazones
y nos das a cambio amor gratuito.
Para ti es suficiente una caricia,
un poco de atención
o un paseo para ser feliz.
Quisiera ver el mundo con tus ojos,
los cuales a pesar de ver en blanco y negro,
son capaces de descubrir en el amor
los colores de la vida.
Poema
escrito por mi hija Daniela Andreína Fortunato Vásquez a su querido perro
Legolas, un golden retriever de sólo dos años. Daniela, al igual que su esposo
Rino Piccione, es médico de profesión y actualmente trabaja en el pueblo
Madonna Di Campiglio, al noreste de Italia, donde hay una estación de esquí con
57 remontes y 150 kilómetros de pista. La localidad alberga con regularidad competencias de la Copa del Mundo de Esquí Alpino. Su residencia la tienen en Trentino Alto Adige, el Tirol italiano, que limita con Austria y Suiza. (En la pintura Daniela (a la derecha) con su hermana Deborah. Tenían seis y ocho años, respectivamente).
Daniela recibió con una sonrisa el mágico y encantador
invierno y con la misma espera la llegada de la primavera,
que ya está tocando la puerta.
Este es el fiel y querido Legolas. Se divirtió
una enormidad entre las blanca y suave nieve.
VERSIÓN ORIGINAL EN ITALIANO
GUARDARE IL MONDO CON I
TUOI OCCHI
Vorrei essere come te caro Legolas,
che ami senza limiti ne confini
e non conosci le differenze che noi umani
ci impegniamo a rimarcare.
Per te non esistono bianchi ne neri,
non sai cosa significa
"extracomunitario" o meridionale,
abile o disabile,
ricco o povero, pulito o sudicio.
Tu guardi solo i nostri cuori
e ricambi sempre con gratuito amore.
Ti basta una coccola,
un po' di attenzione o una passeggiata
per essere felice.
Vorrei guardare il mondo con i tuoi occhi,
che anche se guardano in bianco e nero,
sanno meglio di noi uomini
scoprire nell'amore
i colori della vita.