...y después la calma
Autor: Diego Fortunato
Tecnica: Acrílico sobre tela
Medidas: 122,5 x 76,5 cm.
Año: 1985
Serie: MUJERES DE PIEL DE SOMBRA
COLECCIÓN PRIVADA
¡QUÉ BELLO ES VIVIR!
Aunque me duela el alma
y la tristeza arrope
mis sentimientos,
venceré el desamor
con la fuerza de Dios.
Y no es porque sea lego
o un bobo santurrón
que cree con fanático
fervor en el Divino Señor.
Es que el amanecer del nuevo día,
con sus brotes y retoños,
sus nubes de perla espuma,
el pájaro que canta con alegría,
las sirenas de las inquietas
ambulancias y patrullas,
el ruido de camiones, buses
carros, motos y el sonido
de sus intranquilas y nerviosas
bocinas, me hacen predecir
que nuevamente he despertado
a la vida que ayer dejé al olvido
y anhelante hoy con amor retomo.
¡Qué bello es vivir!
El reclamo del perro ansioso
que apremiado quiere salir
a depositar la caca y su fermento
lejos del encierro protector
de las abrigadas paredes de casas,
solares y apartamentos,
el grito de un niño
que presuroso va al colegio
y el alerta de una madre cariñosa
que en ahogo de amor avisa
“¡Cuidado al cruzar la calle!”,
anuncia que mí corazón palpita
de vida, sueños y energía.
Me desperezo con cándido regocijo.
Mi corazón ríe y agradece
al Altísimo la vida mía.
¡Qué bello es vivir!
Me hipnotiza el café humeante
que en instantes deja brotar
su esencia de grano fino
de exquisito y penetrante aroma.
Después la flor,
con su perfume de vida,
el aire que travieso juguetea
en los laberintos de mis pulmones
y mis oídos que se deleitan
con la armoniosa tonada
de un solitario cristofué
me resucitan a la vida.
¡Qué bello es vivir!
Rebosante el cielo brilla
en el firmamento
de mis añorados sueños.
La tierna y cómplice sonrisa
del sol con su eterno resplandor
me hacen percibir que la vida
esparce bondad y semillas
de aromática existencia
hacia el universo infinito.
Me río placentero y dichoso
el me guiña el ojo entero.
¡Qué bello es vivir!
¡Vive!... ¡Vive!...
Siempre vive…
Porque la vida es bella
pese a sus amarguras,
desaciertos y sinsabores.
Nadie jamás podrá vencerla
porque es dulce cántaro
de existencia donde la fe
deposita su hermosa luz
pródiga de optimismo.
Es huerto fiel lleno
de dichas y esperanzas.
¡Qué bello es vivir!
¡Es el regalo de Dios!...
¡Aprovechémoslo!... ¡Vive!
Dura muy poco... ¡Vive!...
La vida es bella… ¡Bella es la vida!
¡Siempre vive!… ¡Siempre ama!
¡Es el regalo de Dios!... ¡Vive!
La poesía ¡QUÉ BELLO ES VIVIR! forma parte del poemario PALABRAS AL VIENTO de Diego Fortunato.